premio grasa 07 - nominado

en las inmediaciones del Alto Palermo paré un taxi, de noche y con más ganas de volver pronto a casa que Tom Hanks en Náufrago. Abatido por una larga jornada laboral tardé unos segundos, los que demoré en sentarme y cerrar la puerta, en descubrir que dentro de ese auto se situaba el mismísimo infierno.

La cumbia, en su estado más espantoso, invadía el vehículo a un volumen tan alto que jamás una bailanta del conurbano pudo igualar.

"y cómo mueeeeve la cadeeera, a veeeerrr, la mueve despacito...".

Unas luces centellaban desde el tablero, moví mi cabeza para esquivar el apoyacabeza delantero que me impedía ver ese miniplasma colocado sobre la guantera con grabaciones de Pasiòn Tropical o cosa semejante. Una suerte de "enchúlame la máquina" pero más grasa todavía. Atroz.

"...mi negrita quieeere bailar, y mueeeve para acá y mueeeve para allá..."

Así, cada tema que atormentaba mi cabeza iba acompañado con un simpático video que mostraba tipos con trajes brillantes pendulando y alguna que otra muchacha en minifalda sacudiendo su cadera.

"...y tu miraaada de a poooquito me enloooquese..."

A las pocas cuadras el conductor decidió subir el volumen, parece que la grasada no era suficiente. Aunque adivino que uno podía hacer tortas fritas con tanta grasa.

"...querés cumbia? toma!... Este es el saaabor de la cuuumbia..."

Creí que lo peor que podía suceder dentro de un taxi era FM Vale (link). Pero no, hay un submundo peor, hay un infiero negro y amarillo ahí afuera que pertenece a radiotaxi Premium y nos acecha.

Sobreviví para contarlo, pero jamás volveré a extender el brazo en la calle sin temor.

de peronistas, gorilas, pelotudos y fascistas

Leyendo las repercusiones de las elecciones porteñas descubrí que en la prensa comercial y páginas de internet hay mucho gorila de fiesta.

Y antes de empezar a decir diré que no estoy en disconforme por el triunfo de Macri. Por motivos menores que tienen que ver con mi bosterismo y otros de mayor entidad porque presumo que puede ser útil para el fortalecimiento de una verdadera oposición al gobierno federal, oposición que se necesita para que la democracia no derive en ese despotismo que parece ir tomando forma. No se si Macri es la mejor opción, pero por ahora parece ser la única que existe y la necesidad de oposición al gobierno de K. permite darle crédito, al menos hasta que empiece a hacer cagadas como todos.

Decía, mucho gorila festejando y es lógico. Pero también hubo un importante ejercicio del dispare contra Feinmann, quién me cae muy bien y, a pesar de no coincidir con algunas opiniones que vertío, creo que lo que dijo en Página ayer ( http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-87139-2007-06-25.html ) no difiere, en varios puntos, de lo que pienso.

Es divertido ver como algunos medios, Radio 10 e Infobae a la cabeza, le dieron duro al escritor y filósofo. Incluso encontré un blog donde se lo critica y califica, entre otras cosas, de progresista resentido. En ese mismo blog, por ejemplo, hay un banner que defiende la tenencia de armas. No se que es más peligroso, si el resentimiento progresista de un intelectual o un blogger armado.

Volvamos a la nota y a las declaraciones del autor de "Ni el tiro del final". Entre algunas intolerancias propias de la izquierda (que sabemos, a la hora de ser intolerante lo es tanto como la derecha) y algunas ironías hacia Filmus (muy divertidas por cierto) dijo que la clase media porteña es fascista y pelotuda (esto último no está en la nota, pero se lo adjudican).

Creo que JP no reveló nada que no supiéramos. El medio pelo porteño es pelotudo y fascista. Y esto no es nuevo: siempre lo fue. Claro que también hay pelotudos de izquierda y, por supuesto, muchos porteños no pelotudos, no quiero que esto derive en resabios de Unitorios contra Federales. Pero está probado que la masa suele comporta como una entidad gelatinosa, pelotuda y fascista.

Lo que afirmo no lo hago sobre la base del voto a Macri, como lo hizo el autor de "La astucia de la razón". Lo digo porque ese medio pelo pelotudo y fascista clamó por los militares cada vez que el país estaba en problemas, aplaudió a Galtieri cuando invadió Malvinas, legitimó el golpe de estado que el peronismo bonaerense le armó a De la Rua, entre otras grandes proesas populares.

También habla Feinamnn del "factor taxi". Qué es algo que todos sabemos: el tachero es el paradigma de ese medio pelo pelotudo y fascista.

Eso si, tildar a la gente de pelotuda por el sólo hecho de votar a Macri es de intolerante. Y la intolerancia, venga del sector que venga, está mal. Pero lo otro, es gracioso porque es real.

Lástima que un tipo como Feinmann, que ha escrito excelentes libros y da gusto oirlo y leerlo, se haya pegado tanto al gobierno de K. Tanto que muchas veces la cercanía le nubla la vista y pareciera que no le permite ser objetivo ante algunos actos poco claros de este gobierno.

De todas maneras, si de libertad de expresión se trata hay que respetar las opiniones, estemos o no de acuerdo, y más aún cuando quien la emite es un tipo que ha demostrado que sabe pensar.

sextuple

Seis copas son muchas copas.

*Estadísticas:

En los últimos 10 años seis equipos brasileros distintos llegaron a finales de la Libertadores. En los últimos 10 años sólo un equipo argentino disputó finales de la Libertadores: Boca.

De cinco finales disputadas en estos últimos 10 años ganó 4. De 9 finales disputadas en toda su historia ganó 6.

*El fantasma brasilero:

Los equipos brasileros son el terror de los torneos sudamericanos. Pero como la kriptonita para Superman, está Boca que es el cuco de los brasileros.

*El mejor de todos:

Juan Román Riquelme. Hay tres tipos de comentarios sobre él. Los comentarios que hacen los que entienden sobre fútbol, los que hacen los que no entienden mucho y los que hace una madre.

Los primeros, sabén que es un jugador distinto. Los segundos lo tratan de pecho frio. Mi mamá dice que tiene cara de bueno.

El único comentario que importa, como en toda materia, es el de los entendidos (en segundo término el de mi mamá). Román volvió para demostrar que sigue siendo el jugar clave que era cuando se fue. El jugador clave que puso a un club de cuarta en semifinales de la Champions League. El crack que ganó tres copas con Boca y en la última hizo absolutamente todos los goles decisivos. Verlo jugar es ver arte. Es el fútbol en su estado de máxima pureza.

Podría agotar la capacidad de Blogger sólo con adjetivos favorables para Riquelme. Pero basta con verlo pisar la pelota.

*Síntesis:

Seis copas son muchas copas. Veamos, tomemos un equipo al azar, por ejemplo: River. Lo millonarios tiene 2 copas Libertadores. O sea, uno de los equipos más grandes del país tiene sólo dos copas. Si duplica las Libertadores que ganó en toda su larga historia tendría 4. Seguiría estando lejos de las seis que tiene Boca. Debería, entonces, cuadruplicar sus logros en la máxima competición continental para lograr lo que consiguió Boca anoche. Sin dudas, seis copas son muchas copas.

pelado

ahora que terminó la campaña para jefe de gobierno, al menos la serie regular, aún siguen los playoffs. Decía: ahora que terminó la campaña ¿no les parece rara Buenos Aires sin fotos del pelado Telerman por todas partes?
Más linda, claro. Pero resulta que me había acostumbrado.

ocho

A instancia de ella decidí, dejando de lado mi costumbre de no embarcarme en estas tareas, armar un octálogo con datos sobre mi. El juego implica respetar algunas reglas que disponen, justamente, la transcripción de las reglas e invitar a 8 fulanos a hacer lo mismo. Tómese esto último como una transcripción de las reglas. No pienso cursar las invitaciones. Más cuando no hay una amenaza del tipo "no se te para más" si no lo hago.

Ocho datos sobre mi:

1. Cómo Peter Petrelli puedo absorber los superpoderes de la gente que me rodea y utilizarlos como propios. El problema es que no me rodeo de gente con superpoderes.
2. Soy incapaz de resistirme a una definición por penales, a hacer listas de lo que sea y a un Cinzano con ingredientes.
3. La paso bárbaro cuando a river le va mal. Incluso si un niño con una camiseta de river se cae en la calle y llora.
4. No tomo un taxi cuando es un Peugeot 504.
5. Antes tenía un amigo invisible, pero cuando descubrí que no sirve para jugar a la pleiesteishon dejamos de ser amigos.
6. Soy de los que necesitan una lluvia de sapos para darse cuenta de que es el momento (link explicatorio).
7. No duermo con los brazos colgando fuera de la cama.
8. Detesto a la gente que en su discurso intercala, desmedidamente, palabras en inglés.

Sobre el punto 8vo, en algún momento ampliaré. Convivo laboralmente con gente que habla así.

heroes

Las historias de superheroes siempre me gustaron. Me resultan irresistibles. Bodrios cinematográficos como "Los 4 Fantásticos" o "Gatubela" robaron horas de mi vida por culpa de este vicio.

Cuando aparecieron los avances de Heroes, la serie que emite Universal, dos pensamientos me invadieron: qué bueno!, fue uno. Me robaron la idea, fue el otro.

Decir que yo tenía una idea similar para una historia, a esta altura del partido, puede no creerlo nadie. Pero juro que la tenía. Inlcuso, me animaría a decir que era mejor. Pero ya es tarde, como dijo el Bambino en la famosa anécdota.

Ahora estoy trabajando en una historia de un adolescente y un científico que viajan por el tiempo sin motivo alguno, pero suceden cosas que los obligan a seguir viajando. Muy divertida. Espero que no se le haya ocurrido a nadie.

Pero es sobre Heroes este texto y hacia allá vamos. La serie está muy bien. Tiene, a mi entender, algunos errores argumentales que dejan huecos que no cierran con el último capítulo, fragmentos contradictorios en la historia. Errores que, en definitiva, poco importan porque la serie entretiene. Además, es vital cuando nos sometemos a cuentos de superheroes creer mucho y criticar poco. Y a mi me gusta creer. Más aún cuando se trata de gente que vuela, atraviesa paredes o mueve cosas con la mente.

Como siempre me pasa con estas historias, estoy con Sylar, el chico malo. Es que no me banco a Peter Petrelli con su jopo de chico lindo y su cara de preocupado que me recuerda a la única cara que sabe poner Tom Cruise. Tan pelotudo resulto éste pibe, no Tom Cruiste que bastante pelotudo es, sino Peter Petrelli que con un manojo de superpoderes no pudo contra Sylar. Tuvo que venir una mina a defenderlo, hecho que en un mundo machista como el de los superheroes está muy mal visto. ¿O alguién vio alguna vez a la Mujer Maravilla salvando a Superman? No señores, eso no pasa nunca a menos que uno sea un superheroe pelotudo como Peter. No sólo eso, 8 tipos con poderes en una plaza y el malo se escapa. Desde los Thundercats, que siempre dejaban escapar a Mun-Ra, que no veo un acto de semejante negligencia.

Desde el capítulo 10, al menos, estamos esperando el enfrentamiento entre Sylar y Peter. ¿Y qué hacen estos dos tipos? Se dan golpes de puño como si fuera el Club de la Pelea o peor aún: Rocky. Siendo una historia de superheroes, debo pensar que los guionistas se quedaron cortos de ideas o cortos de presupuesto para los efectos especiales del final. En fin, terminó Heroes y dejó un vacío que deberé llenar con alguna otra serie. Se aceptan sugerencias y dvds en préstamo. Por ahora, la veterana Twin Peaks viene a la cabeza, ya tengo los dvds.

Confieso que estoy espectante por el comienzo de la segunda temporada de Heroes. Como ya dije: las historias de superheroes me pueden.

subte línea C

Los lunes a la salida del laburo tomo el subte en la estación San Martín. En la ventanilla atiende una señora que porta más colores y adornos que un pino navideño.
El pelo teñido de un color que se acerca al magenta, los labios pintados de fucsia y los ojos turquesa. La cantidad de collares y anillos que lleva sobre su humanidad no sólo permite sospechar que pasa horas frente al espejo sino también, y esto ya con una entidad tal que podría afectar a la nación toda, que la producción de aluminio, acero y metales similares del 2006 está dentro de esa ventanilla del subte. Con las consecuencias de desabastecimiento a la industria metalera, suba de precios, paros de la UOM y hasta la intervención de Ricardo Iorio, representante máximo del Metal nacional.
Un trabajo interesante hay en sus uñas, que sin ser un entendido en la materia me animaría a señalar como postizas. Eternas, blancas y estrelladas, de algunas de ellas cuelgan breves hilos de metal que acusan, en sus extremos, corazones.
Apostaría una suma considerable de dinero a que en su living uno puede encontrar un muestrario digno de cualquier casa de recuerdos de la costa, elfantes con billetes en su trompa y una selva de plantas de plástico.
Un carnaval para la vista, una tomenta de colores para alegrar la espera hasta hacerse del boleto. Una sinfonía de mal gusto, pero simpática.

the league of crafty guitarist

El viernes fui, con mis amigos habitualistas de recitales de esta calaña, a ver a Robert Fripp & The League of Crafty Guitarist.

A Fripp no hace falta presentarlo, si tal vez a los LCG. En este caso, 11 guitarristas: el director Hernán Núñez (argentino residente en Alemania); los argentinos Fernando Kabusacki, Mariana Scaravilli, Claudio Lafalce, Ignacio Gracián, Jorge Sevilla, Carolina Tonnelier y Luciano Pietrafesa; el español Ignacio Furones; el alemán Martin Schwutke, y el mexicano Leonardo Requejo.

Los 11, sentados con sus guitarras, forman un semicírculo. A un lado, casi oculto tras su “Solar Voyager System”, ese rack llenó de perillas que los auxilia en la creación de sus soundscapes, está Fripp.

El show es una exhibición de la destreza de estos 11 muchachos que transitan un repertorio de temas que van desde The Beatles (Flying; Hey Bulldog) a King Crimson (Thrak y Vroom), pasando por Piazzolla (Tango Apasionado). Fripp, casi ausente, a penas los acompaña.

Después de cada acto de magia y coordinación de estos 11 ostentosos, Fripp toma el mando. Ellos lo dejan solo, se retiran en fila. Fripp lanza sus soundscapes que, confieso, pueden aburrir un viernes a la noche, cerrando una semana agotadora y después de algunos aperitivos. Pero claro, ese señor que está ahí, con sus 61 años inventó Red. Y alguien que armó semejante tema puede permitirse improvisar algunos minutos con su Gibson, distorsionar cada nota hasta lo imposible y hacernos viajar, adormecidos, por sus paisajes sonoros. Hasta que vuelven los 11 esquizofrénicos que durante casi dos horas me desalentaron al pensar que no puedo hacer la intro de Pasajera en Trance sin pifiarla, hundido, claro, en la más pura envidia.

Parte del show se desarrolla con circulaciones, composiciones improvisadas donde los guitarristas se van pasando notas unos a otros moviendo el mastil de la guitarra, como una ola musical, y van tejiendo esas notas y construyendo un ensamble que se combinan con los Soundscapes de Fripp.

Belleza y virtuosismo por donde se lo mire.

Al final, todos aplaudían y pedían más. Todo el teatro de pie. Sin saber que en el hall de entrada del ND Ateneo, la LCG se aprontaba a hacer un mini repertorio a la gorra. No hubo más que trasladarse al hall, como si fuera plena calle Florida, para seguir disfrutando.

para un peronista nada mejor que otro...

Mi amigo F. es kinesiólogo. Tiene un paciente avanzado en años que no está del todo bien del bocho. Hace poco tuvieron el siguiente diálogo:

F.: a quién va a votar Antonio?
A.: yo soy peronista!
F.: va a votar a los peronistas?
A.: no no, yo soy menemista
F.: entonces, usted está de acuerdo con el gobierno de Carlos Menem?
A.: con ese hijo de puta yo no tengo nada que ver...
F.: pero no me dijo que es menemista?
A.: no no, peronista. Peronista de Perón!
F.: digame Antonio, cuándo yo le digo Perón, usted en que piensa?
A.: ... ex Cangallo.

5 mentiras del fútbol

1. todos los rivales son iguales
2. no pienso en lo individual, ni en ser el goleador, lo importante es que el equipo esté bien
3. todavía falta, no nos creemos campeones
4. aunque el pase se haya cerrado no tengo la cabeza puesta en el Milan, para mi importa el partido de este domingo con Arsenal
5. la comisión directiva respalda al técnico